Laluna.com, de Care Santos.

Si hay un ejemplo de novela que no tenga un principio feliz, es este. Un barco atunero llega a puerto y se da cuenta de que hay un cadáver flotando en el mar. Pronto se descubre que pertenece a Cris, una adolescente que estaba pasando unos días de vacaciones en la playa junto a sus amigas. Amador, su novio, acaba de llegar al camping y prácticamente no ha tenido tiempo de estar con ella. Como veréis, no es un principio que invite a la alegría.

Los capítulos siguientes nos cuentan como se conocieron Cris y Amador, pero lo hacen de una manera muy especial. No es un narrador que nos relata de forma ordenada lo que va sucediendo, la historia se va descubriendo a través de los correos electrónicos que se escribieron, y a través de lo que va contando Amador, su prima Cira, e Irene, una amiga de esta última.

No penséis que es todo lacrimógeno (palabra extraña que significa que nos hace llorar), ni mucho menos. Cira e Irene son dos chicas muy decididas y bastante alocadas que se dedican a practicar deportes de riesgo, y tienen un grupo de teatro que se llama Las Lokas. Cuando van contando la historia son muy divertidas, especialmente Cira que se ríe de sí misma todo el rato. Por si hubiera poco lío con los narradores, va a aparecer otro más, que no os desvelo quién es.

Otro enigma para profesores y lectores empedernidos. La novela está relacionada con un mito griego (por el deporte que practican) y con una obra de la literatura francesa (aquí entra en juego otra vez Cira). ¿Cuáles serán? Si no lo sabéis, no os preocupéis, aparece en la novela.

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Booktráiler realizado por Oriol Prat y Dani González, alumnos del Instituto “la Segarra” de Cervera. Asignatura lengua castellana, 2º ESO.